Challengers: no hay dos sin tres
En el cine de Luca Guadagnino la superficie importa y mucho. Son obras en donde predominan los colores y las formas, sí, pero también una gran atención a los detalles de las texturas, al tacto, a la temperatura de la piel y sobretodo el roce entre los cuerpos. No hay que ser un espectador despierto para notarlo, pero no hay que dormirse en la idea que su estilo es solo un envoltorio bonito. “Challengers”, su última película (si no contamos la recientemente presentada en el Festival de Venecia, “