El explorador perdido (1939)

Cuando el periodista y aventurero estadounidense Henry M. Stanley regresa de las guerras de la India occidental, su editor James Gordon Bennett lo envía a África para encontrar al Dr. David Livingstone, el misionero escocés desaparecido. Stanley encuentra a Livingstone ("Dr. Livingstone, supongo") repartiendo felizmente medicina y religión a los felices nativos. Al principio, no se cree en su historia. Cuando Livingstone muere más tarde, Stanley regresa para continuar con el trabajo del buen médico (que, por supuesto, nunca sucedió).