Cállese la boca (1942)

Wellington Holmes, un horticultor tímido y muy tímido, se dirige a Big Bluff. Cuando la diligencia es asaltada por Buckskin Bill y sus hombres, casualmente noquea a tres de ellos y se gana el trabajo no deseado, como Mariscal de Big Bluff. Después de escapar de Big Bluff, disfrazado de mujer, la diligencia es asaltada nuevamente por Buckskin y él, Elena Montoya y su padre son hechos prisioneros. Se escapa de nuevo y cuando Buckskin llega a la ciudad, vuelve a dominar a los criminales. Habiendo estado previamente enmascarado, Buckskin ahora afirma ser el enemigo de Buckskin y los residentes de Big Bluff le creen. Lo liberan y le ofrecen la recompensa por llevar a Wellington al escondite de Buckskin. Así que Wellington y Elena con el dinero del rescate de su padre, pero sin pandilla, salen a buscar a Buckskin. La ley se cumple y todos los criminales son capturados con éxito, llevados a la prisión del condado y puestos tras las rejas.