La reina de las apuestas (1942)

Sherry Baker (Rochelle Hudson), propietaria de un servicio deportivo (una casa de apuestas) tiene mucho éxito y es muy respetada por los apostadores de la ciudad de Nueva York. Ricky Sloan (Buster Crabbe), propietario del equipo de fútbol profesional Panthers, está enamorado de ella. Jimmy Carson ( Donald Mayo ), un niño de seis años, entra en la oficina de Sherry para hacer una apuesta por su madre, quien muere poco después de enviar a Jimmy a hacer su apuesta. Sherry, a regañadientes, se lleva al niño a casa con ella y, después de un tiempo, decide adoptarlo. Pero el tribunal no aprueba el negocio de Sherry, ya que es algo más que ilegal.