Horas de ensueño (1951)

B.G. Bruno, un rico soltero, director de una exitosa compañía de tarjetas de felicitación en Escocia, es esencialmente un hombre amable pero respetable hasta el punto de la pesadez y la extrema rigidez. Una compañía estadounidense que visita Edimburgo quiere producir un musical en la ciudad, pero tiene problemas para conseguir patrocinadores. Bruno conoce a varias de las protagonistas del espectáculo; por un malentendido no corrige la idea de que es reportero de un periódico. Se enamora de una de las mujeres, que corresponde; se vuelve más animado y amigable, para sorpresa de sus empleados. Tras una serie de percances e incidentes cómicos llega un final feliz: un espectáculo de éxito y amor verdadero.