Quiero a este bruto (1950)

En 1928, Big Ed Hanley, jefe de una pandilla de mafiosos de Chicago, tiene dinero y poder, pero está aburrido. Al ver a unos niños jugar en el parque, ve a Ruth Manning y se interesa de inmediato. Él le dice que tiene un par de hijos y le da el trabajo de cuidarlos. Mueve a Mamie como ama de llaves, pero lo mejor que puede sacar como hijo es Harry, un monstruo diminuto. Un par de secuaces enviados para liquidar a Big Ed por su rival, Pretty Willie, son relevados de su hardware por Quentin, el mayordomo de Ed, y Bugs, su mano derecha. Los hacen bajar las escaleras, supuestamente para tirarlos al río, pero en realidad los dejan en una cárcel muy agradable mantenida por Ed para los gánsteres que pasan para liquidarlo. Los problemas de Ed incluyen evitar que Ruth, a quien ha comenzado a gustarle, se entere de sus actividades, aumentar su familia y evitar que los invitados no invitados pasen por allí.