Investigación criminal (1953)

Cuando un oficial de policía recibe un disparo que arresta a un ladrón de autos, el Capitán Barnaby usa sus habilidades y contactos para rastrear a los culpables y descubre un plan de atraco a un banco en el proceso. Barnaby no tiene reparos en torcer la ley para lograr sus fines, incluidos los cargos falsos para persuadir a su único testigo de que coopere o detener a algunas prostitutas para obligar a su señora a que lo ayude. Mientras tanto, se ocupa de los asuntos policiales cotidianos, haciendo malabarismos con asuntos aparentemente triviales con otros más serios.