Toda la verdad (1958)

El productor de cine Max Poulton está teniendo un romance con Gina Bertini, la temperamental protagonista de su última película, que está filmando en la Riviera francesa. El estado actual de Gina y Max nuevamente se debe a que Max prometió irse de su matrimonio con su amada esposa, Carol Poulton, con quien ha tenido una relación a veces tensa. La relación de Gina y Max se traslada a otro reino cuando amenaza con contarle a Carol lo del asunto. Es por eso que Max vacila en divulgar la naturaleza completa de su relación con Gina cuando la encuentran asesinada. Está seguro de que el asesino es un hombre llamado Carliss, que se presentó a Max antes como miembro de Scotland Yard, asistiendo a las autoridades francesas locales en la investigación del asesinato de Gina, esto antes de que Gina fuera realmente asesinada. Carliss aparentemente está tratando de inculpar a Max por el asesinato. Max comprende más cuando descubre quién es Carliss. A pesar de que las autoridades lo persiguen, Max hace lo que puede para limpiar su nombre y proteger a Carol, quien cree que ella también corre peligro.