Une vraie jeune fille (1976)

De mala gana, la única hija Alice Bonnard, una adolescente malhumorada y curiosa, regresa a la casa de campo de la provincia de sus padres para pasar otras vacaciones aburridas e interminables de fin de año desde el internado, en el verano de 1963. Lamentablemente, lo que le espera es una farsa de una familia feliz, una brecha generacional extenuante, salidas solitarias con su bicicleta y una etapa trascendental incómoda y torpe entre la pubertad de una niña y la adolescencia de una joven. Sin embargo, como si por instinto, Alice, la exploradora inmadura de su sexualidad en ciernes, se encontrara enamorada de Jim, un trabajador de pucheros masculino en el aserradero de su padre, incursionando en el deseo y el arte de la deseabilidad, la autoexploración y el autoeroticismo como antídoto contra el aburrimiento. Finalmente, la joven Alice que mezcla la realidad con la visión, las fantasías sexuales y la feroz sexualidad femenina enjaulada con todos los fluidos viscerales posibles, los límites indefinidos del reino insondable del sexo se vuelven muy claros, bajo la incandescente banda sonora del pop francés.