Patines de plata (1943)

Claire (Patricia Morison), propietaria de un espectáculo sobre hielo, se enfrenta a la bancarrota porque Belita (Belita), la estrella del espectáculo, está a punto de irse y casarse con su amado Tom (Henry Wadsworth). Danny (Kenny Baker), cantante del programa, y ​​Claire están enamorados, pero Claire se niega a casarse hasta que pueda recuperar el programa. Katrina (Irene Dare), una refugiada huérfana de 10 años de Holanda, llega al programa en busca de su tío, ahora en el servicio. Claire quiere adoptar a la niña pero tiene que casarse, por lo que decide aceptar la propuesta de Danny. Él, sin embargo, ha estado haciendo una jugada para Belita, con la esperanza de mantenerla en el programa. Belita se pelea con su prometido y Danny pronto, y sin querer, se encuentra comprometido tanto con Claire como con Belita.