Chilly Willy (1953)

Una goleta ancla en el Polo Sur, y el patrón baja a tierra y deja a la mascota del barco, un perro San Bernardo, para vigilar y vigilar el barco. Un pequeño pingüino, Chilly Willy (el único pingüino que no está equipado para el clima frío ... en cualquier lugar), ve el barco e intenta calentarse junto a su estufa. El perro guardián intenta deshacerse de él, pero Willy logra emborrachar al perro con el ron en su propio barril. El capitán regresa y encuentra a Willy salvando el barco del hundimiento, mientras que el perro se encuentra durmiendo. Willy se convierte en mascota y el perro es arrojado al calabozo del barco.