Rositza (1944)

Toma es dueño del aserradero. Rositza es pariente lejana de Toma y trabaja como ama de llaves en su casa. Rositza está enamorada de Dobri, el hijo de Toma, pero su estado no le permite revelar sus sentimientos. Además, Dobri está comprometido con Elena, hija de un próspero comerciante. Unos días antes de la boda, Dobri regresa borracho a casa. En el periódico de la mañana lee que la noche anterior mataron a puñaladas a un hombre con una navaja. Descubre que su navaja se ajusta a la descripción del papel con la hoja rota. Dobri confiesa todo a Elena y sus padres. Elena no se casará con un criminal. Dobri describe su situación a Rositza y le declara su amor. Rositza se dirige a Elena y le explica que Dobri es inocente: hace algún tiempo, la propia Rositza rompió el cuchillo. Mientras tanto, el verdadero asesino había sido capturado. Dobri se entera de la visita de Elena de Rositza. Dobri la alcanza en el camino y la toma en sus brazos.