Prudence y Belisarius Beresford

Prudence y Belisaire son lo que se puede llamar una pareja excéntrica. ¿Cómo puedes llevar nombres cristianos (?) tan imposibles en primer lugar? No debe haber otro Belisaire en Francia; ¡En cuanto a Prudencia, hay pocas damas más imprudentes que ella! Imagínense: Belisaire es coronel en el servicio secreto militar y ex-maestro en... ¡planchado! Y Prudence, poco inclinada a ser la madre modelo, prefiere hacer de detective aficionada. Como era de esperar, cuando varios jubilados de un hogar de ancianos comienzan a morir misteriosamente, Prudence está feliz de dejar atrás a su hija, yerno y nietos en su hermosa casa para seguir el rastro de la aventura.

Prudence Beresford está investigando otro asesinato. Su tía lo había presenciado, pero no se encontró ningún cuerpo y nadie confiaba en su palabra. ¡Nadie, excepto Prudence, por supuesto!

Prudence y Bélisaire Beresford han decidido tomarse las cosas con calma. Pero cuando una rica heredera rusa desaparece, Prudence no puede resistirse y Bélisaire se ve obligada a emprender la aventura. Su investigación los pondrá tras la pista de un misterioso científico que guarda el secreto de la eterna juventud...