Ghost in the Shell

Ambientada en el Japón futurista, la película sigue a la agente ciborg Motoko Kusanagi en su búsqueda de un misterioso pirata informático, profundizando en temas filosóficos como la identidad propia, la conciencia y el impacto de la tecnología. Con unos impresionantes efectos visuales que combinan animación tradicional y CGI, la película ofrece una atractiva exploración de la condición humana en una sociedad tecnológicamente avanzada.

Batô es un cyborg vivo. Todo su cuerpo, incluso sus brazos y piernas, son completamente hechos por el hombre. Lo único que queda son rastros de su cerebro y los recuerdos de una mujer. En una era en la que el límite entre humanos y máquinas se ha vuelto infinitamente vago, los humanos han olvidado que son humanos. Este es el libertinaje del fantasma solitario de un hombre, que sin embargo busca retener a la humanidad. Inocencia ... Es lo que es la vida.