Mediki (2002)

La profesión de médico ha estado cubierta durante mucho tiempo con anécdotas, historias, historias divertidas. Podemos decir que nació un tipo de humor "médico" especial, ligeramente filosófico. Un joven médico residente en ejercicio comprende los matices de su futura profesión. Se encuentra con una variedad de personajes, una especie de "héroes de nuestro tiempo": la mujer del diputado, que defiende maniáticamente los derechos de su marido; un bandido, descansando de las penurias del oficio en una sala separada con guardias; un cirujano que sueña con mudarse a Israel; una doctora, una georgiana, una mujer inteligente y mujeriego que busca una "opción" con un apartamento.