The Line (2009)

Ser policías ha dejado al descubierto a Max y Donny, hasta el punto en que son tan moralmente ambiguos como los criminales a los que persiguen. Max ha desarrollado sus propios métodos para lidiar con los malos, habiendo perdido interés en el trabajo policial convencional, mientras que Donny se ha vuelto un poco trastornado por el trabajo, pero sigue siendo fielmente optimista. Los caminos de los socios se cruzan con el narcotraficante local Carlos, que está atrapado en una guerra territorial y a quien Max usa para infiltrarse en el inframundo criminal del vecindario.