La serie es más bien un espectáculo sádico donde todos y cada uno de los personajes son juguetes masticables, condenados a sufrir una muerte espantosa, espantosa y absolutamente repugnante.
Blasfemia
No contiene
No hay diálogo, por lo que no es posible decir palabrotas.
Aunque la mayoría de las veces se escuchan galimatías, en algunos momentos si escuchas atentamente puedes escuchar algunas malas palabras, pero eso no sucede muy a menudo.
Abuso de sustancias
No contiene
Uno de los personajes, Pop, se muestra con una pipa en la boca y fumándola a veces.
Contenido intenso y aterrador
Fuerte
Esta serie se disfraza de dibujos animados para niños todos los días, pero es una serie de animales que sufren muertes dolorosas y de pesadilla. Flippy/Fliqpy sufre PTSD, o trastorno de estrés postraumático, y cuando se activa, se vuelve loco y no se detiene hasta que básicamente no hay nadie a quien matar.