Deliveries from Eva (2024)

Reese, una estrella de la música que actualmente cumple una condena de arresto domiciliario, se sorprende al descubrir que todavía tiene una fan en la forma de la repartidora Eva. Los dos forman una improbable amistad que comienza a agriarse debido a la creciente obsesión de Eva y sus luchas con el trastorno de estrés postraumático, que se deriva de las dificultades sufridas durante su servicio en el ejército. A medida que el brote psicótico de Eva continúa creciendo, Reese se encuentra encerrado literalmente por su sentencia penal y, en sentido figurado, por el miedo al comportamiento impredecible de su mayor fan.