Wizdom

En un futuro en el que la luz del día es escasa, los humanos viven con implantes oculares en una colonia llamada Wizdom. Wizdom está dirigida por una corporación de biotecnología que mantiene su control emitiendo "tiras W" farmacéuticas obligatorias a los ocupantes de la colonia, Neons, a través de sus ojos para evitar que sus cuerpos rechacen los implantes. Eos, una ladrona profesional, se deja llevar por la emoción del atraco. Con el botín en la mano, Eos conoce a Carbon, un misterioso forastero que engaña a Eos y a su hermano menor Vayle para que tomen una droga que, según se rumorea, muestra a los usuarios visiones del futuro y mejora permanentemente su visión y poderes extrasensoriales. Eos y Vayle se enteran de que su futuro destino es desmantelar Wizdom y renunciar a su control sobre los Neons, a expensas de sus propias vidas. Eos y Vayle se preguntan si su destino está escrito en piedra o si tienen la libertad de cambiarlo y, de ser así, ¿quieren hacerlo?