Lo más buscado
No se encontraron resultados
Escribir un artículo
Iniciar discusión
Crear una lista
Subir un video
Ya conocíamos el gusto de Gaël Lépingle por las pequeñas ciudades de provincia,y con su preciso,insistente,y a menudo generoso interés en sus habitantes y su ansia de aventuras,como se muestra en su obra,de Julien (FID 2010) a Only Pirates (FID 2018).Las ciudades de provincia se muestran aquí a través del prisma del viaje de los chicos a los que les gustan los chicos,narrado por Gaël Lépingle como tres cuentos ambientados en tres lugares diferentes,tres rebanadas de la vida que involucran elecciones.En cada uno de estos cuentos,el director retrata con delicados toques diversas formas de vivir como homosexual,en lugares donde es posible,o a veces impensable,pero siempre alejándose del dramatismo y los clichés habituales del género.En la escena inicial,un joven parece estar soñando con una realidad diferente al negocio que está a punto de tomar y la vida de casado que lo acompaña;se siente atraído por la vida picante de una compañía de vodevil queer que actúa en su pueblo.Luego seguimos los vagabundeos de un adolescente,la improbable experiencia de su esbelta figura caminando por las calles de su pueblo.Finalmente,vislumbramos la pasión fetichista de un respetable maestro,antes de ser enviado de vuelta a su camino de renuncia.Estos tres retratos acaban componiendo un fresco.Gaël Lépingle se convierte en el cartógrafo de áreas inexploradas del deseo,en paisajes desprovistos de calidad y nitidez,pero lleno de la espantosa banalidad de los destinos predeterminados.Tantos caminos por recorrer y decisiones por tomar para estos muchachos provincianos.Lépingle delinea sutilmente callejones sin salida y aberturas,y se demora en el intermedio: entre las palabras y los cuerpos,entre el deseo y la vida desolada,entre cuerpos y paisajes,buscando la distancia justa entre los seres.Con el disfrazarse y sus posibilidades como fórmula secreta que los conecta a todos.(Nicolás Feodoroff)