Un año difícil (2023)

Albert y Bruno están en números rojos, consumidores compulsivos, sobreendeudados, viven entre pequeños planes para uno y una vida personal a la deriva para el otro. Es en el camino asociativo que ambos recorren para salir a flote donde se encontrarán con jóvenes activistas rebeldes, alarmistas climáticos, amantes de la justicia social y de la ecorresponsabilidad. Más atraídos por la cerveza y las patatas fritas que por sus argumentos, Albert y Bruno se irán integrando poco a poco en el movimiento, sin convicción, si no de aprovechar cada acción y cada rebelión para maquinar y sacar provecho de ello. Entre el minimalismo ideológico o sufrido, entre el sobreconsumo y la feliz sobriedad, nos enfrentamos a la compleja simplicidad de nuestro futuro, a las oposiciones y paradojas de nuestro tiempo, en definitiva, todo está bien.