Las personas se quitan la vida, aunque hay detalles visuales limitados.
Las muertes de otros se escenifican para que parezcan un suicidio.
Hay secuencias de amenazas sobrenaturales, en las que las personas son perseguidas por apariciones fantasmales, y hay momentos de sobresalto.
En una escena, un hombre es amenazado por un espíritu vengativo que lo agarra por el cuello, lo ata con cables eléctricos cercanos y lo arroja por la ventana de un edificio alto.
En una escena de amenaza sexual, un hombre le propone proposiciones a una empleada en su oficina y la agarra de la muñeca, aunque ella logra escapar rápidamente.
Las acciones del hombre son criticadas por la película.