La última dama de honor (2019)

Becca Foster es siempre la dama de honor (la boda de su prima Lucie es la tercera vez este año y la décima vez en su vida) y nunca la novia.ese último problema, que está bien para ella sabiendo que eventualmente sucederá y sucederá orgánicamente, ya que su última relación seria le mostró que no se puede forzar.Por eso también,mientras ella aprecia el sentimiento,no le gusta la presión de que Lucie la engañe con el padrino de su prometido Craig,Aidan,los dos que tendrán que pasar mucho tiempo juntos en sus respectivos roles de boda.Debido al horario de Lucie y Craig,la planificación de la boda tiene que suceder todo en el lapso de cinco meses,lo cual es un mal momento para Becca, aunque solo sea porque la fecha de la boda es aproximadamente el momento en que está programada para hacerse cargo del negocio de seguros de la familia,que ha parecido su destino desde que era una niña.También en la línea de cosas que suceden orgánicamente,Becca ha puesto su inclinación artística únicamente en el ámbito de un pasatiempo,más específicamente su fabricación de joyas, que hace para sí misma y como regalos para sus novias emocionadas, como si estuviera destinado a ser su camino profesional,se habría manifestado de alguna manera.Esa creencia la pone en desacuerdo con Kyle Taylor,una realizadora de documentales que conoció inicialmente como videógrafa en la boda número nueve,también asumió ese papel para la boda de Lucie y Craig.Él cree que el amor y el romance requieren trabajo,y que una chispa inicial puede no conducir a un felices para siempre.Sin importar,se hacen amigos animando al otro en su pasión por la fabricación de joyas y la realización de documentales como en lo que el otro debe centrarse en su vida profesional.En el proceso,sentimientos románticos entre los dos se acercan sigilosamente a ellos.Una relación romántica sostenida se ve amenazada por baches en sus aspiraciones profesionales.