Lo más buscado
- Escribir un artículo
- Iniciar discusión
- Crear una lista
- Subir un video
Después de viajar por la Italia de los "musicarelli" de la década de 1960 con Nessuno mi può giudicare, Della Casa vuelve su atención a los archivos posteriores a la Segunda Guerra Mundial. El resultado es una radiografía de un país diferente: narrado por los políticos Togliatti y De Gasperi, por el cine de Germi y Castellani, por el irónico análisis social de Eduardo y Zavattini, por la brutalidad cultural de Bianciardi, y los ritmos salvajes de boogie-woogie. Una biografía a través de imágenes de una Italia insólita, en constante transformación.