18th & Grand: The Olympic Auditorium Story (2021)

El Auditorio Olímpico abrió sus puertas en 1925 cuando Los Ángeles explotaba, un palacio de lucha de última generación para entretener a las masas. Pero el estadio, construido para rivalizar con el Madison Square Garden, fue un pozo de dinero desde el principio. Los promotores turbios iban y venían hasta que el dueño del edificio se arriesgó con una madre soltera que nunca había visto una pelea profesional. Tomando el poder en medio de la Segunda Guerra Mundial, Aileen Eaton construyó un imperio deportivo que duró casi cuatro décadas, lanzando estrellas y convirtiéndose en la promotora de boxeo más poderosa de Estados Unidos. A medida que pasaron los años, la promoción olímpica de Eaton reflejó los gustos cambiantes y la demografía de la ciudad, prosperando en gran parte debido a la lealtad de los fanáticos mexicano-estadounidenses. Cuando el edificio se vendió y Aileen fue expulsada en 1980, el Olympic luchó nuevamente, convirtiéndose brevemente en la catedral de concreto del hardcore punk hasta que chisporroteó hasta una muerte sin gloria. En 2005, el edificio se vendió nuevamente, convirtiéndose en la Iglesia Gloria de Jesucristo, una megaiglesia coreana.