Gabe (2017)

Ningún padre debería tener que enterrar a su hijo, pero esa era la realidad a la que se enfrentaban Dick y Josephine Weil cuando a su hijo adoptivo Gabe se le diagnosticó distrofia muscular de Duchenne. A la edad de diez años, Gabe estaba en silla de ruedas. Para cuando era un adolescente, necesitaba un cuidador a tiempo completo. A pesar de su sombrío diagnóstico, Gabe hizo su meta en la vida obtener un título universitario, sabiendo que tal logro era más de lo que la mayoría podía esperar de él. En diciembre de 2013, Gabe se graduó de la Universidad de Washington en St. Louis, cumpliendo ese sueño. Casi al mismo tiempo, los médicos le informaron que había sido mal diagnosticado todo el tiempo y, como tal, que podría vivir hasta los 50 años. Aunque esta noticia fue abrumadoramente positiva, presentó un obstáculo sorprendente. Gabe no tenía ningún objetivo a largo plazo. Se vio obligado a repensar su vida desde cero. Este cambio radical en la conciencia lo impulsó a establecer nuevos objetivos, continuar superando obstáculos y manifestando más sueños. Gabe es un testimonio de la perseverancia humana y un recordatorio de que, a pesar de nuestras diferencias, todos estamos conectados a través de nuestra humanidad compartida.