Salute to Life (1990)

En su lecho de muerte, la abuela expresa sus últimos deseos: que su nieto, Vulcano, se gradúe de la escuela y que su familia continúe con su legado de amor y tradición. La abuela muere en paz, pero su esposo de más de 50 años sale corriendo del hospital, negándose a creer que su esposa se ha ido. Durante el próximo año, la familia intenta ayudarlo a aceptar su pérdida, pero él se niega a aceptar que ahora está solo. Finalmente, se da cuenta de que incluso en la muerte, el amor continúa y que nunca estará solo mientras tenga a su familia y los hermosos recuerdos de su esposa. Por fin, el abuelo permite que su amada descanse.