Esoteric Agenda (2008)

Decir que es una teoría de la conspiración es quedarse corto. El destino del mundo no está en manos de la gente, como debería estar. Más bien, un creciente cuerpo de evidencia apunta a un antiguo orden esotérico que está detrás de las guerras, el hambre, las economías e incluso los principales medios de comunicación. Desde logotipos corporativos hasta insignias militares, vemos sus símbolos todos los días, pero no reconocemos el alcance de su control. Es como si sus secretos estuvieran escondidos a simple vista. En un mundo donde parece no haber esperanza, más allá de las imágenes brillantes que nos distraen de la verdad, podemos descubrir nuestra propia naturaleza sagrada y recuperar el mundo.