PPRESSED (2016)

Desde la era de los 70, Battle Rap se ha convertido en su propia industria dentro del hip-hop. Las discográficas no tienen control, y cuando lo tienen es comercializado. Los sellos discográficos están tratando de hacerse con el control una vez más y sacar provecho de este fenómeno del rap de batalla. Esta vez, las calles deben restaurar el orden recuperando tanto su sangre rara como la sensación de cuando había mensajes en la música, cuando los maestros de ceremonias tenían habilidades reales sobre cómo sacude el micrófono. ¿Qué rapero irá por el título de Street line y ganará más de medio millón de dólares libres de impuestos y ganará el derecho a fanfarronear mientras trata de vivir para hablar de ello?