Grandads-Robbers (1972)

Un viejo detective no quiere jubilarse, especialmente si el motivo de su retiro es liberar un lugar para el estúpido joven "promovido por los mejores". La única salida es convencer al jefe de que el héroe todavía puede investigar crímenes complejos de manera efectiva. Junto con su amigo ingeniero que se va a jubilar, decide cometer un crimen perfecto él mismo y luego resolverlo rápidamente. Pero el primer intento de crimen ideal pasa inesperadamente desapercibido para cualquiera; y después de convencer a su amiga, una empleada bancaria, de participar en otro escenario de "crimen falso", se enfrentan a un problema real: el dinero finalmente es tomado por un criminal real.