Los aventureros de Lucky Lady (1975)

Es 1930.Claire (Liza Minnelli), una estadounidense que vive en Tijuana, México, acaba de enterrar a su esposo Harry, que era dueño de un bar de buceo allí.Walker Ellis (Burt Reynolds), un perdedor con quien durante mucho tiempo ha tenido algo de lado, acepta resolver sus asuntos en Tijuana para que pueda mudarse a Estados Unidos antes de que estén juntos después de un período de duelo apropiado.Resolver esos asuntos incluye el contrabando de un último camión lleno de inmigrantes mexicanos ilegales a través de la frontera.En ese trabajo que no va del todo según lo planeado, Walker se ve obligado a dedicarse al ron comercial corriendo por la frontera con Kibby Womack (Gene Hackman), uno de los que estaba tratando de pasar de contrabando a través de la frontera, Kibby, un estadounidense en problemas con el tío Sam .En lugar de por tierra, Walker ha contratado a Billy Mason (Robby Benson) como Capitán del velero para transportar las mercancías por agua, Billy es un hombre joven y tranquilo que no conoce los caminos del mundo, pero sabio cuando se trata del mar.Mientras Walker, Claire, Kibby y Billy navegan por las aguas en esta aventura, encontrarán dos riesgos inherentes.El primero es la U.S.Guardacostas, el oficial capitán Moseley (Geoffrey Lewis), que patrulla estas aguas.Moseley y la Guardia Costera no pueden hacer nada si están en aguas internacionales a menos que haya una señal de carga ilegal o una venta de mercadería ilegal.Como tal, Moseley generalmente puede simplemente "matar de hambre" a los corredores de ron que simplemente navegan de un lado a otro de la costa sin poder atracar en una U.S.Puerto.Y en segundo lugar están otros corredores de ron.Mientras que los jugadores pequeños generalmente se dejan en paz, la mafia de la costa este ha enviado a Christie McTeague (John Hillerman) a colocar primero un punto de apoyo y luego un dominio absoluto en toda la costa oeste de México-U.S.comercio.A pesar de todo, Claire ha convencido a Kibby y a un Walker inicialmente reacio de que su negocio de tres socios debería extenderse al dormitorio.