Souris, tu m'inquiètes (1973)

La felicidad familiar descansa muchas veces sobre un drama insospechado: la pérdida de identidad de la mujer cuya vida pasa a ser la de su marido y sus hijos. Ante "el malestar que no tiene nombre", Francine, una joven aparentemente realizada, se verá llevada al punto de dejar temporalmente a su familia para descubrir quién es ella. Esta película da testimonio de la complejidad de la vida y de la existencia cotidiana tal como la percibe una mujer quebequense.