Bartleby (1976)

Un alguacil dirige una pequeña oficina en el centro de París. Complementó el pequeño personal contratando a un nuevo empleado, Bartleby. Este demuestra su valía, luego comienza a rechazar ciertas tareas. Luego se deja morir de hambre para señalar su oposición al mundo. Esta resistencia genera perturbaciones cada vez más graves a su alrededor. Preocupado, incapaz de despedirlo, el alguacil deja que el equipo y el estudio se marchiten.