El personaje femenino principal se presenta acostado en una cama, completamente desnudo. Luego se despierta y se ducha; un hombre invisible hace comentarios (no sexuales) sobre su belleza, a lo que ella responde. Luego descubre que el hombre la ha estado filmando y desactiva la cámara. Luego se viste con un mono de cuero ceñido, perdona al hombre y le dice que no vuelva a actuar de manera inapropiada. A lo largo de la mayor parte de la secuencia, sus senos (incluidos los pezones) y la parte posterior son visibles.
El amor/lujuria/deseo del protagonista por el personaje femenino principal es un tema clave en la película.
Una mujer acepta la oferta de un hombre para una cita y comienza a maquillarse. Impaciente, el hombre hace un comentario levemente sexual sobre cómo ella no necesita hacerlo.
Un hombre se ducha. Está desnudo, pero no se ve nada objetable, y la (breve) escena está destinada principalmente a fines cómicos.
Una mujer le cuenta a un hombre la naturaleza sádica de uno de los villanos. En un flashback, se muestra al secuaz azotando a la mujer en las caderas, lo que rasga la parte trasera de su mono. Su trasero se muestra brevemente antes de volver a la realidad. El hombre comenta que rara vez se encuentra en tales situaciones.
Un hombre proclama su amor por una mujer, y ella le ofrece besarla. El hombre se ríe con picardía, pero la mujer, al notar su comportamiento pervertido, lo golpea en la cara.
Un hombre intenta (cómicamente) forzarse a sí mismo sobre una mujer, y caricaturescamente se lanza hacia ella, y sus pantalones se salen en el proceso. Sin embargo, queda inconsciente por las drogas para dormir que la mujer le había dado previamente y cae al suelo. Su trasero se muestra mientras cae. La mujer lleva lencería durante toda la escena.
Un secuaz persigue a un hombre a través de una pintura clásica que representa a mujeres desnudas.
Una mujer viste un atuendo un tanto revelador (jeans rosados ajustados y una blusa tipo sostén).
Un hombre y una mujer comienzan a besarse en broma, pero son detenidos por el villano principal, que siente repulsión por lo que está viendo.
La guarida del villano principal incluye copias de las pinturas de la Capilla Sixtina de Miguel Ángel de Adán y Eva y la Creación de Adán. Las pinturas representan la desnudez de una manera no sexual.