Ladrones de coches (1983)

Después del intento de robo del coche del marido de su hija, el capitán Gibbs de LAPD declara la guerra al maestro ladrón de coches Maindrian Pace, cuya compañía de investigación de seguros ofrece la fachada perfecta. Un capo de la droga sudamericano le paga a Pace y su equipo para que le roben 48 autos, por lo que se ponen en marcha mientras la policía trata frenéticamente de localizarlo. Sus esfuerzos dan sus frutos cuando el jefe de Pace lo traiciona y les avisa sobre su próximo trabajo. La policía persigue a Pace en "Eleanor", el último de los autos necesarios para cumplir con su contrato, a través del sur de California mientras intenta escapar.