Polvo de diamantes (1987)

Un judío muy fiel (Levy) trabaja haciendo polvo de diamante en el taller de su familia, para venderlo a las industrias. Un día se va de viaje de negocios. En el mismo tren va una chica muy sexy, con unas bolsas de heroína (adivinas) muy parecidas a las bolsas de diamantes. La policía comienza a perseguir a la niña y ella esconde la droga en la bolsa de Levy. La chica llama a su jefe ("Goliat") por la situación y él y su banda comienzan a acosar a Levy, quien, en ese momento, vendió las bolsas a una fábrica, sin saber el contenido. Tiene que salir del problema con la ayuda de su hermano y de su Dios.