Saaya (1989)

Supriya y Rakesh están felizmente casados ​​con su hija Mini, un convicto de prisión. Rakesh escapa de la prisión e intenta matar a Supriya. En su propia deferencia, lo prende fuego y lo lleva a su muerte. Supriya es perseguida en la corte donde revela un flashback de cómo conoció a Rakesh, quien era un buen fotógrafo pero se dio cuenta de que no tenía buenas intenciones y la hipnotizó usando sus poderes de magia negra y trató de violarla. Ella descubre que él también es un psicópata. Rakesh además, con sus poderes de magia negra, intentó hacer suya a Supriya y matarla. Todos los que se cruzan en su camino durante este tiempo, ella es salvada por el superintendente de policía Ravi y luego se casan después de que Rakesh fue encarcelado. El tribunal absuelve a Supriya cuando ella lo atacó en defensa propia, pero el alma de Rakesh comienza a perseguir a Supriya, Ravi y su hija.