Powrót wabiszczura (1989)

El protagonista conduce un Volkswagen por una carretera de montaña, cargando a su hija de doce años. Tras un accidente en el que muere su hija, acaba en un pueblo de una zona montañosa desértica dominada por la juventud punk. El alcalde trata de ganarse a los recién llegados, pide el cumplimiento de las leyes y costumbres aplicables, aunque al mismo tiempo anuncia que la autoridad que representa no está interesada ni en las costumbres de los recién llegados. Pronto tiene lugar una serie de crímenes, y los punks están bajo sospecha. Todos los intentos de echarlos de la ciudad son infructuosos y, lo que es peor, la comunicación con el mundo exterior se ha desactivado. Finalmente, durante el ayuntamiento, se sugiere que solo Plowy podría sacar a los punks de la ciudad.