Dos viejos más gruñones (1995)

Las cosas no parecen cambiar mucho en el condado de Wabasha: Max y John siguen peleando después de 35 años, el abuelo todavía bebe, fuma y persigue mujeres, y nadie ha podido atrapar al legendario "Catfish Hunter", un gigantesco bagre que en realidad sonríe a los pescadores que intentan atraparlo. Hace seis meses, John se casó con la nueva chica de la ciudad (Ariel), y la gente comienza a sospechar que Max podría estar perdiendo algo similar en su vida. La única alegría que Max afirma que le queda en su vida es la pesca, pero eso podría cambiar con el nuevo propietario de la tienda de cebos.