El rey de las máscaras (1995)

Wang Bianlian es un artista callejero envejecido conocido como el Rey de la Máscara por su dominio del Arte del Cambio de Sichuan en una historia real. Su esposa lo dejó con un hijo pequeño hace más de 30 años. El hijo murió a causa de una enfermedad a los 10 años. Esto dejó a Wang como un melancólico solitario anhelando que un descendiente masculino aprendiera su raro y moribundo arte. Un famoso maestro de la Ópera de Sichuan se ofrece a incorporarlo a su acto, lo que le da a Wang fama y una posible fortuna, pero Wang opta por seguir siendo un simple artista callejero. Luego, una noche después de una actuación, un traficante de esclavos le vende un niño que se hace pasar por el padre del niño. El "abuelo" encuentra una nueva alegría en la vida cuando planea enseñarle a "Doggie" (un término cariñoso que se usa a menudo para los niños pequeños en China) su arte. Todo va bien hasta que se descubre que Doggie es realmente una niña.