Niobe (1915)

Niobe era hija de Tautolus y esposa de Anfión, rey de Tebas. Su orgullo por sus hijos provocó a Apolo, quien los mató. Entonces Niobe estaba tan abrumada por el dolor que se convirtió en una estatua de piedra, de la que brotaron fuentes de lágrimas. Tompkins, un entusiasta del arte, compra la estatua, que se ha ido perdiendo a lo largo de los siglos, y la tiene asegurada por la empresa de la que es presidente Peter Amos Dunn, que se lleva la estatua a su propia casa para custodiarla. Los electricistas, cableando la casa, dejan cables con corriente a los pies de la estatua, y de repente la hermosa Niobe se baja de su pedestal y se enfrenta al sorprendido Dunn. No puede explicar la presencia de la diosa a su familia. Pero recuerda que se espera una institutriz, que ha enviado sus baúles por adelantado, en uno o dos días. y se le ocurre el plan de vestir a Niobe como institutriz y presentarla a su esposa e hijas como tales. Cómo termina la comedia se aprende mejor desde una vista de la imagen.