La princesa de las ostras (1919)

Quaker rey de las ostras ya no puede quedar impresionado. Es tan rico que incluso tiene un mayordomo especial sosteniendo su cigarro mientras fuma. Lo único que impresionaría a Quaker es que su hija Ossi se casara con un príncipe de verdad. Hace una oferta al pobre príncipe Nucki, quien envía a su amigo Josef para que se haga una idea clara de la mujer.