Squire Phin (1922)

Squire Phin se gana el cariño de los residentes de Palermo por su habilidad para resolver todas las disputas, mientras que su hermano, Hiram, que regresa después de 10 años de ausencia, es bien recordado y odiado por ser el matón del pueblo. Hiram se entera de que el juez Willard está usando la tesorería de la ciudad para sus propios fines y busca derrotarlo en una elección. Mientras tanto, Squire Phin, que ama a la hermana de Willard, hace campaña por el juez. Hiram se apacigua cuando Squire Phin convence al juez Willard para que devuelva el dinero, y el pacificador recibe el permiso del juez para casarse con su hermana.