Al comienzo de la película hay varias escenas extendidas en las que unas cuantas personas escalan una roca muy grande y empinada sin ningún tipo de arnés de seguridad. Nadie se cae nunca, pero hay algunas situaciones que estuvieron a punto de caer, como el caso de una persona que resbaló dramáticamente. Estas escenas se desarrollan para ser más cómicas, en lugar de explícitamente intensas.
Un hombre cae a un río y termina en un molino de agua, y parece probable que salga lastimado, aunque el trabajador del molino aparta la maquinaria a tiempo.