La llama eterna (1932)

John ha llevado una vida solitaria durante 30 años desde la muerte de Moonyean Clare. Pero ahora Owens, un amigo cercano, insiste en cuidar a su sobrina, Kathleen, que quedó huérfana cuando sus padres se perdieron en el mar. Kathleen tiene cinco años, pero los años pasan y ahora es una joven que es la imagen de Moonyean. Willie quiere a Kathleen como esposa, pero saltan chispas cuando conoce a Kenneth Wayne una noche oscura y tormentosa. John está horrorizado, porque fue el padre de Wayne quien mató a tiros a Moonyean el día de su boda y John nunca lo encontró ni perdonó a la familia. Cuando Ken se va a la guerra, John prohíbe cualquier matrimonio y Ken está de acuerdo, mientras que Kathleen no. Cuando Ken regresa cuatro años después, cuando termina la guerra, está lisiado. Oculta su condición y hace planes para irse a América.