El pan nuestro de cada día (1930)

Charles Farrell (que protagonizó prácticamente todas las películas de alto arte de Frank Borzage) interpreta a Lem Tustine, el hijo de un granjero de trigo de Minnesota que ha sido enviado a la gran ciudad para vender la cosecha del año. Conoce y se enamora de una camarera solitaria (Mary Duncan) y la lleva a casa con la gente. A su llegada, Kate descubre que Lem está controlado por su padre dominante (David Torrence), quien la rechaza por considerarla una cazafortunas desde antes del momento en que la conoce. La relación de Lem y Kate se desmorona aún más cuando un grupo de trabajadores ruidosos (liderados por Richard Alexander) llegan para recoger la cosecha y comienzan a coquetear con la mujer mundana a quien el destino ha arrojado a la triste granja. Una tormenta de granizo que se acerca empuja a los trabajadores al límite físico y ejerce una tensión emocional sobre la familia Tustine que parece destinada a separarlos o, posiblemente, unirlos.