La jugadora (1934)

Un sindicato profesional gestiona todos los locales de juego de la ciudad; menos rentable es el honesto Mike Lee. Bajo presión para permitir la trampa, Mike "se va", dejando a su hija de mente dura, Lady Lee, para ganarse la vida de la única manera que ella conoce. Pronto se convierte en un éxito en las apuestas entre los ricos, pero, al pelear con el sindicato, considera la propuesta de matrimonio del sangre azul Garry Madison. ¿Puede funcionar un partido así a pesar del esnobismo y las viejas asociaciones?