The House of the Arrow (1940)

Si el asesino de la rica viuda Mme.Harlowe (Louise Hampton) no se hubiera basado en la información obtenida de un libro en su biblioteca, la anciana podría haber vivido durante años, como suelen hacer los inválidos crónicos. El asesino se basó en la información falsa de que el surare, el veneno nativo mortal, no deja rastros después de la muerte. Y así, el inspector Hanaud, el eminente detective de París, llegó a Dijon para resolver el misterio de la Maison Grenelle. Encuentra a Betty Harlowe (Diana Churchill), la sobrina de la víctima, sospechosa por la policía, y Ann Upcott (Belle Chrystall), la compañera de la mujer muerta, en un estado de semi-histeria. Y también hay un escritor de cartas anónimo conocido como The Scourge. Como pistas, Hanaud tiene un trozo de papel carbonizado, una carta anónima y un portalápices que no es en absoluto un portalápices. A partir de estos, construye un caso contra el culpable, hasta que está lo suficientemente seguro como para arriesgar la vida de Betty para hacer que el asesino confiese.