Pilotos de altura (1937)

Dos hombres que realizan un viaje en avión de carnaval son contratados para volar y recuperar lo que creen que son fotografías para un periodista. En realidad, están recuperando diamantes robados a un conocido comerciante de gemas. Resulta que su avión se estrella en la misma propiedad del traficante. Pensando que el dúo son policías, el traficante ofrece su casa para su convalecencia del accidente. Mientras tanto, los diamantes han sido arrebatados por un perro cleptómano y enterrados en la finca. Cuando los contrabandistas rastrean a la pareja, intentan convencer al traficante de que son funcionarios de una institución de la que los dos escaparon. Al poco tiempo, los compañeros de carnaval, los delincuentes, el comerciante de gemas y su familia, junto con un pelotón de policías, están destrozando el terreno para encontrar dónde el perro ha enterrado los diamantes.