Girls in Chains (1943)

Cuando Ruth Martin es despedida de su puesto de profesora porque su hermana está casada con un criminal notorio (que básicamente dirige la ciudad), acepta un trabajo en un centro correccional para niñas. Su intención es tratar de preparar a los reclusos para una vida mejor una vez que sean liberados. Ruth se encuentra con el supervisor (controlado por su cuñado) que solo está interesado en sacar dinero del presupuesto y su pandilla de matronas que solo quieren mantener a las chicas haciendo cola para lavar la ropa.